Las descomposturas en los subwoofers son provocadas por problemas con la potencia admisible, que puede ser sobrecargas de naturaleza eléctrica o mecánica, o ambas. Y como generalmente el problema se genera por una mala instalación o ajuste, o el abuso del sistema por parte del usuario, hemos decidido presentarles este modesto artículo, con la intención de que conozcan un poco la naturaleza de los subwoofers.
Eléctrica o mecánica…
La sobrecarga de tipo eléctrica ocurre cuando se le aplica demasiada potencia al subwoofer, y en consecuencia, la bobina móvil se quema. Esto puede ser resultado de calibrar incorrectamente la ganancia (picos y distorsión), o de haber conectado mal el subwoofer, lo que puede provocar que el amplificador detecte una impedancia de carga demasiado baja.
La falla mecánica ocurre cuando la bocina se desgarra, o se rompe físicamente. Generalmente, la causa principal de una falla mecánica es porque no se calculó bien el tamaño de la caja acústica donde se instala este tipo de parlantes.
Por regla general, procura permanecer en un rango de +/- 20 por ciento del volumen de la caja acústica recomendado por el fabricante (Vb), para garantizar que el subwoofer desarrolle su máximo desempeño.
Si la caja acústica para el subwoofer es demasiado grande, entonces la suspensión mecánica del subwoofer está en riesgo, llegando incluso al extremo de que la araña, o la envolvente de suspensión, pueden desgarrarse o romperse, e inclusive puede llegar a separarse del armazón de la bocina.
Cuando se utiliza una caja acústica que resulta demasiado pequeña para el tamaño recomendado por el fabricante, esto por lo general, no provoca ningún efecto adverso en la potencia admisible, así que resulta una apuesta mucho más segura.
La segunda causa más importante de una descompostura mecánica en el subwoofer es cuando la caja acústica es ventilada y no corresponde a las características de la bocina. Cuando la frecuencia no se calibra bien, eso puede provocar que la potencia admisible mecánica de la bocina se reduzca, y la bocina corre más peligro cuando funciona por abajo de la frecuencia a la que fue "calibrada" la caja acústica.
Se recomienda verificar el diámetro y la longitud del puerto con relación al volumen interno recomendado para esa caja acústica, para ver que concuerde con las recomendaciones del fabricante.
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