Necesitas que te instalen el flamante y estupendo sistema de sonido que acabas de comprar. Quizás podrías pedirle a un amigo que instale tu sistema a cambio de un cartón de cervezas, que tú gustosamente le ayudarías a acabarse, pero esto a la larga podría salirte caro, dado que tu amigo probablemente no tenga el tiempo, el conocimiento o las herramientas adecuadas para hacer el trabajo. Hay demasiadas cosas que una persona debe saber para que una instalación le quede bien. Entonces el principal problema para disponer de un sistema de sonido a la altura de tus necesidades es encontrar el taller de instalación adecuado, con personal altamente calificado y con experiencia.
¿Pero cómo encuentras un instalador al que puedas confiarle tu sistema de car audio? En general, no se trata de una búsqueda muy difícil. De hecho, muchos instaladores también están buscando clientes, lo único que debemos hacer es juntar estas dos necesidades. Para ayudarte, te presentamos una serie de preguntas que podemos hacer al instalador antes de dejarle nuestro vehículo, dictadas por el sentido común y mi propia experiencia.
1. ¿Cuántos proyectos similares hizo el instalador el año pasado?
Algunos instaladores pueden hacer parecer que se especializan en todo tipo de proyectos, pero si tú les pides que lo expresen en números probablemente tengas una idea más realista de qué tan competente es para lo que tú quieres que te hagan. Si realmente son tan diestros como dicen, deben poder darte una lista de proyectos terminados, enumerando sus características.
2. ¿El taller tiene una lista de clientes anteriores para consultarlos como referencia?
Prácticamente cualquier instalador calificado y cualquier empresa independiente que se dedique a las instalaciones, podrá ofrecerte una lista de referencias, esto es una lista de clientes satisfechos. Ocasionalmente los instaladores que se sienten muy orgullosos de su trabajo tienen a la mano un álbum de fotografías de lo que han hecho.
3. ¿Quién llevará a cabo realmente el trabajo?
Antes de contratar a un instalador es, quizás, el aspecto más importante y sin embargo suele ser el más descuidado. Este paso consiste en verificar por tu propia cuenta que el instalador realmente está calificado para el trabajo.
En primer lugar, nunca confíes tu auto a cualquier persona que no cuente con conocimientos de primer nivel. Deben demostrarte que constantemente se están capacitando. Probablemente te encuentres con instaladores que dicen no necesitar capacitarse, puesto que llevan haciendo esto desde hace muchos años, lo cual indica que han dejado de aprender cosas nuevas durante ese tiempo, y representan un riesgo para tu vehículo. Cualquier instalador con la actitud correcta debe tener muchas ganas de demostrar que se ha ganado a pulso un lugar en esta industria, y para eso nada mejor que la capacitación continua.
Entrenamiento y capacitación
Un instalador que se capacite en escuelas especializadas en electrónica automotriz y en talleres que impartan cursos de técnicas avanzadas en instalación, demostraran que tienen sólidos conocimientos en la física verdadera del sistema de sonido automotriz y no ideas extrañas que flotan en todos esos foros de Internet.
Un instalador novato que aprendió el oficio sin la ventaja de una capacitación formal está propenso a meter la pata en algún momento, y si tú le das oportunidad, eso podría ocurrir en tu vehículo.
Los instaladores saben muy bien su negocio, y les gusta poner manos a la obra, pero con frecuencia no son muy buenos para discutir las cosas. A estos hombres de acción les interesa mucho hacer que las cosas comiencen a ocurrir, en lugar de platicar cómo hacerlo. Pero necesitamos sentarnos a conversar con ellos, hasta que entiendan perfectamente lo que quieres en tu sistema. Asegúrate de hacer las preguntas pertinentes para confirmar que están en la misma frecuencia.
Ah, y otra cosa, sería bueno que tengas la mente abierta para seguir algunas recomendaciones del instalador, en lugar de aferrarte a hacer todo lo que tú habías pensado, después de todo, recuerda que el instalador conoce muy bien este campo.
El problema principal por el cual un cliente pierde la confianza en un instalador es simplemente de comunicación. Si te entregan una instalación que no es lo que querías en principio, te equivocas al echarle la culpa al instalador diciendo que es deshonesto o incompetente. En algunas ocasiones la cantidad de trabajo y el grado de detalle, y por lo tanto el costo de la instalación, no se deja perfectamente claro durante la discusión previa.
Pago justo
Finalmente debes estar consciente de que puedes comprar el mismo producto con diferentes proveedores, y siempre optamos por el de menor precio. Ahora bien, yo considero que la selección de un instalador es algo mucho más importante que la marca de un producto. La instalación tiene que ver con el gusto personal de cada uno, así que nunca pongas en duda el valor del trabajo necesario.
Debes averiguar de antemano que te está ofreciendo el instalador a cambio del dinero que le pagas, pero si quieres un precio más bajo, entonces quizás recurra a una serie de recortes de presupuesto con resultados que no habías previsto. Cuando los instaladores se dan cuenta que están recibiendo una tarifa justa a cambio de su labor, ellos te respetan como cliente. Recuerda, si pagas con cacahuates, estarás contratando monos.
Nunca habíamos necesitado tanto a técnicos profesionales, entrenados y capacitados en la industria automotriz como lo necesitamos ahora. No olvides confiar en tu intuición, si notas algo que no parece estar bien con tu instalador, entonces mejor sigue buscando.
Recomendaciones adicionales
1. Conoce al instalador en persona y explícale lo que quieres que se haga.
2. Verifica la certificación de los cursos que dice haber tomado.
3. Escucha las sugerencias del instalador, o ideas alternativas.
4. Que te quede bien claro cuánto costará la instalación y los accesorios que se necesitan.
5. Muéstrate amable con el instalador, aunque sólo sea para ofrecerte como referencia o recomendación para otros clientes. He descubierto que invitarle una cerveza o un refresco, es una forma de reconocimiento muy bien recibida.
6. Existen versiones de pacotilla y versiones de gran clase del mismo trabajo, así que debes decidir de antemano si quieres un trabajo al "ahí se va" o si verdaderamente te interesa algo que será construido para durar mucho tiempo. Recuerda que las instalaciones gratuitas lo son por una muy buena razón.
7. Da el tiempo suficiente. Es común que los instaladores se retrasen, y la presión que ejerce un cliente impaciente puede provocar serios errores.
8. No estés cambiando aspectos de la instalación sobre la marcha. De antemano debes tener un plan y después apegarte estrictamente a él.
9. Debes elegir un taller que esté a la altura de la instalación, una tienda departamental no resultará nada adecuada para un sistema de competencia.
10. Que te hagan una lista detallada de todo lo que estás pagando, y ¡que te lo den por escrito!
Artículo publicado en la Revista AudioCar #198.
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